Era un niño normal, tal vez un poco delgado para la edad que parecía tener. El renombre de la calle vendría después. Algunas circunstancias surgidas de improviso la convertirían en una magna institución dotada de vida propia y de prestigio. En adelante sería señalada como la Treinta y siete, como si se hablara de la avenida Tenerife, la Circunvalar o la Pastrana, sólo que en ella el nombre no había sido propuesto por los políticos de turno, sino que había brotado como manifestación de la vitalidad de sus habitantes. Pudiera haber sido una relación de causa-efecto. También pudiera haber existido una extraña coincidencia en los repentinos aumentos: el del peso del gordo y el de la popularidad de la cuadra. El gordo llegó sin aspavientos, incluido dentro de un trasteo oscuro y rutinario como los que a diario transitaban por la ciudad. Pausadamente vimos descender una nevera repleta de peladuras, una cocineta herrumbrosa de dos puestos, un televisor en blanco y negro de catorce pulgadas y una antigua jaula con una lora desplumada y aterrorizada. La bienvenida que les deparamos fue poco cordial, acostumbrados a no encontrar motivos de alegría con la llegada de nuevos vecinos.
El foco sólo era mi maltratador. Me gusta mucho como escribes. Quería venir a España y que nos conocieramos en Madrid. Creo que hay incluso matrimonios rusos que estando en una situación económica precaria, intentan estafar a españoles o hispanos.
Por eso durante la velada, de vez en cuando la miramos a los ojos con discreción. Y una vez en casa, nos encanta comentar la jugada, hablando de lo que ha pasado y de cómo nos hemos sentido. Debido a esta afinidad intelectual, cuando nos relacionamos con otras personas transmitimos muy buen rollo como pareja. Compatibilidad espiritual. Es decir, el que tiene que ver con la dimensión espiritual, con la finalidad trascendente o no que le damos a nuestra existencia. Comprobemos que cree en nuestros sueños, nos apoya en nuestras aspiraciones y mira en la misma dirección que nosotros. Y es que la vida es un camino de aprendizaje. De ahí que sea esencial elegir a la compañía adecuada. De este modo construimos un estilo de vida por consenso, respetando las necesidades y motivaciones de cada uno.
Todas mis fotos son recientes, caseras y sin retoques, para que no te decepciones al verme y tengas una impresión totalmente contraria de mi. Soy una espanola alegre y dispuesta a estar contigo, la acompañante ideal de Tarragona para pasar momentos bellos y maravillosos. Llevo mi trabajo muy en serio. Fisioterapeuta rubia 24 años. Quieres comprobarlo. Sam 22 universitaria. No esperes en conocerme, estoy de paso por tu ciudad.
